Las 5 ciudades más peligrosas de España
En la actualidad vivimos en un país teóricamente seguro, comparado al menos con otros que viven situaciones de conflicto social, económico o incluso bélico y que representan un mayor riesgo para la población.
Pese a ello, el peligro sigue presente, sobre todo en lo referente a robos en hogares y negocios y más todavía si no cuentan con la protección adecuada.
¿Cuáles son las ciudades más peligrosas de España?
Para medir el grado de peligrosidad de cada ciudad española, el Ministerio del Interior publica periódicamente un Balance de Criminalidad, en el que se registran los delitos penales en todas las localidades con más de 50.000 habitantes. Este informe estadístico, permite identificar ahora mismo cuáles son las ciudades más peligrosas de España.
El Prat de Llobregat (Barcelona)
La localidad de El Prat de Llobregat, ubicada en Barcelona, ha sido identificada como la más peligrosa de todas al alcanzar una tasa de infracciones penales de hasta el 86,2 por cada 1.000 habitantes.
Barcelona (Cataluña)
La capital catalana también se suma a este ranking, al registrar una tasa de 70,8 por cada 1.000 habitantes. Barcelona es una de las dos grandes capitales que forma parte del listado.
Torrevieja (Alicante)
Curiosamente todas las localidades que registran mayores tasas de criminalidad están en zonas costeras. La tercera posición es para Torrevieja, en Alicante, con una tasa de 66,6 infracciones por cada 1.000 habitantes.
Marbella (Málaga)
En la cuarta posición está Marbella, en Málaga. La localidad andaluza no solo es uno de los destinos turísticos más famosos del mundo, sino también la cuarta con más delitos, en una tasa de 65,5 habitantes por cada 1.000 personas.
Palma de Mallorca (Baleares)
El listado lo cerramos con una segunda capital de comunidad, Palma de Mallorca en las Islas Baleares. La ciudad ha alcanzado una tasa de infracciones penales que llega a 62,5 por cada 1.000 habitantes.
Cómo proteger hogares y negocios en las ciudades más peligrosas de España
Independientemente de la ciudad en la que vivimos, no estamos exentos de riesgo. Los robos, hurtos y entradas en hogares y negocios pueden producirse en cualquier momento. La mejor forma de protegerse es con las medidas de prevención adecuadas.
Entre las soluciones de seguridad interior más recomendadas para estos casos, resulta de gran ayuda instalar una central de alarma con dos vías de comunicación (así si una falla se mantiene otra línea de apoyo), para tener la seguridad de que ante cualquier intrusión se comunique a las autoridades lo antes posible.
Dependiendo del inmueble o de las características del establecimiento, podemos aconsejar un detector de rotura de cristal, sensores de vibración o incluso detectores volumétricos interiores.
Además, una sirena interior es un equipo disuasorio que genera un ruido de gran molestia para los intrusos, así como también avisa al vecindario de que se ha producido una intrusión.
Estas soluciones, en combinación con otros sistemas de seguridad perimetral y de video vigilancia ayudan a reforzar la seguridad allí donde son instaladas, tanto para disuadir a los delincuentes de interesarse por entrar como también para detectar el delito al instante de cometerse.